Debería estar acostumbrado a las despedidas, al decir adiós o con suerte un hasta luego. Dedicarse a una misma cosa o persona, hace que tengas un vinculo especial: aprendiste de fallos y aciertos, tener el valor de ponerme delate e intentarlo sin saber si saldrá como a ti te gustaría, aceptar consejos o buscar alternativas......es un mundo.Mi padre me dijo una vez que nunca terminaba lo que empezaba, tenia razón, di un paso atrás y detenidamente me centre en los mil proyectos que nunca había terminado, no les quedaba nada para que estuviesen rematados....pero no lo hacia. Con el tiempo me di cuenta que no los terminaba por varias razones: no me gustaba como iba a terminar, ya se como terminarlo pero lo finiquito en otro momento, me gusta como esta quedando...pero me gusta para mi.
Hace tiempo me dolía mas, pero ahora las despedidas son mas aguantables, aprendí que tengo que terminar lo que empiezo y que con el tiempo se van, pero se abren nuevos horizontes :-)
